Condenaron a psicólogo por abusar de dos pacientes, una de ellas de 10 años; piden que se lo inhabilite de por vida

La madre de una de las denunciantes dijo a El País que “no tiene lógica que siga ejerciendo, cuando la condena es por abusos que cometió ejerciendo su profesión”.

Compartir esta noticia
Fachada de la Suprema Corte de Justicia.
Suprema Corte de Justicia. No llegó a analizarse el recurso presentado por el psicólogo, se descartó por motivos formales.
Foto: Archivo El País.

Una niña de 10 años les pidió a sus padres que no la mandaran más al psicólogo. Ellos creían que no quería afrontar las sesiones, pero no era eso. Otra joven de 18 años, que se había atendido siendo menor de edad con él, en un momento golpeó la puerta para no volver jamás. En 2025, la Suprema Corte de Justicia condenó a este profesional por delitos sexuales ejercidos contra estas pacientes puertas adentro de su consultorio, el lugar al que habían ido para lograr estar un poco mejor. La pena es de cinco años de cárcel, pero la lucha principal de las víctimas tiene como objetivo que este hombre no vuelva a ejercer.

La causa inició en 2021, cuando aquella niña que pidió no ir más al psicólogo cumplió la mayoría de edad. En ese momento pudo contarle a su nueva terapeuta lo que había vivido, y con ayuda de ella a sus padres. Ese infierno le había marcado la infancia.

Sus padres la habían tenido siendo muy jóvenes y, pese a estar separados, siempre habían sido un “equipo” para ella. Entre sus 7 y 10 años, decidieron mandarla a un psicólogo para que la ayudara a sobrellevar una situación familiar particular. Él tenía 33.

“Confiamos ciegamente en él, porque realmente éramos dos chiquilines bastante vulnerables… Para nosotros, lo que nos decía en ese momento, era palabra santa”, declaró la madre en el juicio oral.

Ella era una niña alegre e inquieta a la que le encantaba hacer gimnasia artística. Por eso no le llamó la atención que su psicólogo le pidiera que hiciera paros de mano y otras piruetas. Pero esa fue la forma en la que él comenzó a perpetrar los delitos sexuales, que se repitieron en muchas sesiones posteriores.

Además, se abusó de su profesión para encubrir lo que había hecho, concluyeron dos psicólogas que fueron claves en las pericias del caso. Intentó, en una “perversa estrategia” que ponía en práctica en medio de los abusos, hacerle creer que quien le estaba haciendo daño no era él, sino su padre. Es decir, pretendía implantarle un falso recuerdo.

La familia radicó la denuncia penal en agosto de 2021 y, una vez avanzada la investigación, se sumó al caso otra víctima, la que ya era mayor de edad cuando el psicólogo abusó de ella.

Otra víctima

La segunda víctima había denunciado inmediatamente después de ocurridos los hechos, pero la Fiscalía había archivado su caso.

La joven conocía al psicólogo porque la había tratado siendo menor de edad. A los 18 volvió porque estaba pasando un mal momento, tenía diferentes problemas de salud mental y sufría mucho desde que le habían sacado la tenencia de su pequeña hija.

En una de esas instancias, el psicólogo trancó la puerta del consultorio y cerró las cortinas. Le dijo que él podía hacerle un informe favorable para el expediente de la tenencia si ella accedía a salir con él. También, le contó que “desde antes” la “miraba con deseo”, pero como era menor de edad “no se atrevía”. Finalmente se abalanzó, la arrinconó contra una pared, la besó varias veces sin su consentimiento, metió su mano dentro del pantalón de ella y tocó sus genitales.

Ella es “una chica con dificultades económicas, pobre, sin apoyos familiares”, relató su nueva psicóloga en el juicio.

Durante todo el proceso, el psicólogo argumentó que la joven lo denunciaba producto de su problema de salud mental. Respecto de la víctima que fue abusada cuando era niña, indicó que lo que relataba era una “fantasía”. Sin embargo, el juez Marcelo Malvar lo condenó a cinco años de cárcel por delitos de atentado violento al pudor y un delito de abuso sexual. Este fallo fue confirmado por el Tribunal de Apelaciones y luego, por la Suprema Corte de Justicia. En febrero, tras la emisión de esta sentencia, el psicólogo pisó por primera vez la cárcel.

Pena

Está previsto que el psicólogo esté tras las rejas dos años más, puesto que los otros tres los cumplió en arresto domiciliario esperando a que quede firme la sentencia. Sobre este punto, Soledad Suárez, que fue defensora de la familia de la primera víctima, valoró: “Más allá de que no soy punitivista, Género es una de las materias en las que más casos llegan a juicio y se transitan todas las instancias. Eso le permitió pasar más de la mitad de su pena en prisión domiciliaria”.

“En algún punto es un privilegio que tienen quienes cometen este tipo de delitos, comparado a otras poblaciones imputadas penalmente que rápidamente pasan a prisión preventiva, por tener otro tipo de perfiles. En estos casos, se termina considerando que la persona tiene un riesgo bajo y se le concede la domiciliaria, cuando lo que ocurre es de riesgo alto”, desarrolló.

La madre de la joven que fue abusada a sus 10 años dijo a El País que el deseo de su hija es “que nadie más pase por esta situación”. “Su meta es que no vuelva a ejercer”, explicó.

La sentencia lo inhabilita por diez años, pero aún figura como habilitado en la página web del MSP. La familia calcula que, luego de que salga en libertad, estará vedado de ejercer solo por ocho años.

Ya se pusieron en o con la Coordinadora de Psicólogos del Uruguay y analizan la posibilidad de presentar una carta en el MSP. “No tiene lógica que siga ejerciendo, cuando la condena es por abusos que cometió ejerciendo su profesión”.

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

Suprema Corte de Justicia

Te puede interesar