El próximo 26 de mayo Defensor Sporting Club celebrará sus elecciones presidenciales y habrá cuatro candidatos. Uno de ellos será Daniel Acuña, de Encuentro 1989, agrupación que como oposición en la actual directiva fue decisiva para la decisión de no aceptar la oferta por el Complejo Arsuaga en camino Pichincha.

— ¿Por qué quiere ser presidente de Defensor Sporting?
— Encuentro 1989 surgió hace más de una década como respuesta al deterioro institucional del club. Hemos participado en elecciones y en directivas haciendo una oposición responsable, con gran destaque en varias comisiones y defendiendo el patrimonio de Defensor Sporting con firmeza, como hicimos con Pichincha. Sentimos que este es nuestro momento, tenemos el equipo para eso, el más capacitado para gobernar en este momento del club que está en una crisis desde distintos puntos de vista y necesita cambiar.

— ¿Qué haría primero en caso de ser electo?
— De entrada vamos a tener un diagnóstico de la situación y una asamblea para que los socios y socias vean desde dónde arrancamos y puedan participar de decisiones estratégicas. Vamos a tomar las decisiones que el club tiene que tomar. Por ejemplo, tiene que tener una gerencia general institucional, una deportiva y apuntalar áreas clave como la istración. Hay que profesionalizar al club en todos los aspectos. Hemos tenido logros como oposición: en el pase de Giorgian De Arrascaeta sugerimos quedarnos con un porcentaje de una futura venta, fuimos minoría y hoy nadie discute esos porcentajes. En aquel entonces el club no tenía un contador rentado y exigimos, además, una auditoria externa que hoy tenemos.

— ¿Cómo está conformada su lista?
— Nuestro eslógan es ‘El voto confiable, el cambio seguro’. Tenemos una combinación de experiencia y renovación. Gente que ha estado en directiva durante años y jóvenes muy preparados. Es una mixtura que creemos esencial para encaminar al club hacia el lugar en el que nunca debió dejar de estar.

— ¿A qué aspira en este período?
— Aspiramos a una política deportiva clara que va a tener una consecuencia en el tema económico y financiero donde es prioridad salir de esta situación muy complicada. Así como planteamos la independencia en la AUF y pasar a ser referentes, como lo fuimos históricamente, estamos frente a un tema que son los derechos de televisación y nuestra posición es firme en cuanto a llamar a licitación. Entendemos que lo que el club cobra por este concepto se incrementará.

Foto: María José Acuña.

— ¿Cómo planean abordar el tema del pasivo que tiene el club?
—Está vinculado con el tema de la política deportiva, que tiene que ver con la económica. Tenemos que promover a nuestros juveniles para transferirlos como una fuente de ingresos. Después, ordenar y ser eficientes en los gastos: no podemos contratar jugadores que no están en el plantel y representan un dinero importante. Vamos a analizar pormenorizadamente toda la situación financiera y empezaremos un camino con proyección para salir de esto. Pensamos en armar una comisión de estrategia que proyecte al club de aquí a 20-30 años.

— ¿Qué opina de la oferta recibida por el Complejo Arsuaga en camino Pichincha?
—Era un pésimo negocio que comprometía lo más sagrado del club: sus juveniles, que no pueden correr ningún riesgo. Gracias al equipo del Encuentro 1989, liderado por el contador Ramiro Roldós, que hizo toda una investigación, logramos frenar ese atropello y revertir la opinión del oficialismo.

— ¿Consideraría una SAD para el club?
—No. En nuestro programa está explícito: no apoyamos una Sociedad Anónima Deportiva. Sí creemos en profesionalizar la gestión y tratar al club como una empresa en su funcionamiento, pero sin perder su esencia y pertenencia: el club es de los socios y socias.

— Un mensaje para los socios...
Esta es una muy buena oportunidad para cambiar el club. Tenemos equipo para gobernar y poder posicionar al club en el lugar que tiene que estar, que es ser la mejor institución deportiva del Uruguay.

Foto: Archivo El País.