Redacción El País
El ministro del Interior, Carlos Negro, se expresó este martes acerca de la carta que difundió el narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, en donde dio a entender que está radicado en Venezuela y reclamó a las autoridades que dejen de buscarlo.

"Hace décadas que el narcotráfico emite esos mensajes hacia los sistemas políticos y los estados", dijo Negro durante una rueda de prensa, y agregó: "Hay una disputa de poder entre las grandes organizaciones criminales por la gran disponibilidad de recursos que se manejan".

Según manifestó, los narcotraficantes "llegan a disputar espacios con los estados" pero "en Uruguay eso no ocurre". "No obstante sabemos que hay importantes figuras a nivel internacional que han salido de este país y tratan de hacerse visibles mediante este tipo de comunicados o amenazas que en nada alteran el trabajo del Ministerio del Interior uruguayo", manifestó.

La misiva fue difundida en Informativo Carve (AM 850) por la periodista Patricia Martín, la misma que, para el programa Santo y Seña (Canal 4), logró entrevistar al narcotraficante en un paradero desconocido. Según dijo la comunicadora, se trata de un comunicado que le hicieron llegar fuentes cercanas al prófugo.

"Les dejo un breve comunicado para todos y cada uno de los países que me persiguen", comienza la misiva del narcotraficante, que es uno de los cinco más buscados por la agencia de lucha contra el tráfico de drogas del Departamento de Justicia de Estados Unidos (DEA).

Foto: REPRO - Imagen de TV.

En referencia a las autoridades de Uruguay, señaló: "Me fui en el año 2018 y nunca más volví, no entiendo cuál es el deseo sexual que tienen conmigo. ¿Por qué no se ocupan mejor de los problemas del país y se olvidan de mí que estoy lejos hace 7 años?".

En cuando a Bolivia, reclamó: "El narcotrafico es el crecimiento del país, el país se sustenta de eso, así que entre fantasmas no nos vamos a pisar las sábanas. Tampoco hay una puta prueba contra mí ni mi familia, se inventaron un caso que estoy tratando de revertir con dinero, que al final de cuentas eso era lo que querían".

Luego se refirió las autoridades de Estados Unidos. "A esos malditos gringos no les tengo ni un pelo de miedo, les dejo bien claro y ya lo tienen bien claro (también me quieren inventar un caso) que yo jamás en mi puta vida ni siquiera he hablado de ustedes, para mí no existen".

Entonces se refirió a Federico Santoro, también uruguayo pero radicado en Paraguay y que fue detenido y autodeclarado culpable de lavar dinero para Marset. "Lo que haya hecho el sapo de Federico Santoro mediante cuentas bancarias lo hizo él, ese no era mi trabajo. Si él se convirtió en sapo ahora, que tenga los huevos para asumir que ese era su trabajo", exclamó Marset.

"Yo no soy cambista, yo manejo mi rubro bien manejado, y no me meto en los trabajos de otros. Nunca le pregunté ni siquiera cómo bajaba el dinero. Así que si lo hacía de EE.UU., China o Chile como dicen a mi me chupa tres huevos, yo no lo hice, por lo tanto no he cometido ningún delito en los Estados Unidos, así que déjense de joderme".

Finalmente, destinó buena parte de su carta a Paraguay: "Ustedes, mal paridos que también viven del narcotrafico en gran parte de su país, respeten el narcotrafico, dejen de meterse con mi familia, tienen a la madre de mis hijos (Gianina García Troche) presa, sin ni siquiera una TV en su celda, aislada como si fuera una delincuente peligrosa, y esa mujer no ha cometido ningún tipo de delito en toda su vida, y ustedes lo tienen claro".

"Primero para sacarle una orden de captura le metieron organización criminal, narcotrafico y lavado de activos. Ahora que ya lograron tenerla ahí 'es solo lavado' y de ese pu** lavado no tienen una sola prueba, porque nunca hubo lavado de dinero en su nombre", escribió Marset, y luego añadió: "Como a mi hermano y mi cuñado, que les pusieron 'lavado de activos' por tener uno un auto a su nombre y otro una camioneta".

"Son unos hijos de pu** ustedes, eso no es lavado de activos en ninguna parte del mundo. Si van a seguir haciendo una persecución a mi familia, más vale que tengan los huevos bien puestos, porque pelear con fantasmas es difícil, yo tengo media ciudad tomada, no voy a accionar porque sé que mi problema con tiempo y dinero lo voy a solucionar, pero ustedes me están agotando la paciencia", continuó.

"La tuvieron 10 meses presa en España, ahora llegó y dan una audiencia para dentro de seis meses. Son unos mal paridos, unos hipócritas. Ustedes manejan la droga que entra y sale del país, la Senad (Secretaría Nacional Antidrogas) principalmente. Bueno, Daniel Fernández, el director de la SIU (Unidad Especial de Inteligencia Sensible Antinarcóticos y Hechos Punibles Conexos), se sentaba a sacar cuentas (él más su gente de confianza) de cuántos kilos llevaba en las vueltas. Sin el permiso de él las cosas no se hacían. Pero claro, como es del gobierno, es delincuente con diploma, nadie le hace nada. Pero ese es más narcotraficante que cualquiera ahí en su país", siguió el uruguayo.

"Si viven del narcotráfico, respeten el narcotráfico, si no les puede ir mal. La únicas pruebas que tienen contra mí, y acepto que las tienen porque yo no soy mentiroso y tampoco me creo que gané dinero jugando al fútbol… esas pruebas no les sirven de nada porque han violado las leyes de entrega de pruebas", agregó.

Entonces se refirió a que lo hablado por Sky ECC, una aplicación de mensajería que solía ser utilizada por narcotraficantes, "no es una prueba aceptada ya en varios países porque no se ha agarrado a las personas con el teléfono en la mano, se ha intervenido la central Sky de manera ilegal". Además "las pruebas a Paraguay llegaron desde Francia en intercambio de información ilegal también, rompiendo la cadena de custodia".

"Por eso les digo que con tiempo y dinero solucionaré todos mis problemas. Y agarrarme no me van a agarrar nunca, porque inteligencia tienen cero. Ustedes necesitan de sapos para capturar, y los míos, los que están a mi lado, son leales. Pueden ofrecer cien millones de dólares si quieren, eso no me da ni un poquito de miedo", expresó.

"Creen que estoy en Venezuela, bueno, al menos aquí hay un presidente (Nicolás Maduro) que tiene los huevos bien puestos y todo el gobierno es un narcogobierno pero no lo niega ni le da poder a esos gringos", escribió Marset.

"Acá se paran en la línea y se mantienen firmes. No son como los hipócritas paraguayos que le lamen los huevos a los estadounidenses pero trafican sin parar. Yo sé muchas cosas… Quizá por eso cuando mis abogados hablaron con el fiscal general de Paraguay para que yo me entregue y dejaran de molestar a mi familia, no aceptaron. Yo creo que vivo no les sirvo porque sé mucha cosa, arrastraría a muchos conmigo. Me prefieren muerto".

Marset agregó les sugirió que "no peleen con fantasmas". "A los de México los acorralan, a Pablo (Escobar) lo acorralaron, pero yo para ustedes soy un fantasma. Entonces mejor hagamos las cosas en paz. Liberen a la mamá de mis hijos que está sufriendo indebidamente, y también están sufriendo mis hijos por no poder estar con ella", continuó, y finalmente dijo: "Si en algún momento quieren llegar a un acuerdo conmigo, mis abogados pueden sentarse a escuchar, pero dejen mi familia en paz. Yo sé que nada es gratis, pero digan la cifra y terminemos con esta farsa".

La carta la cerró con "saludos cordiales".