Redacción El País
La noche del 10 de mayo de 2024 varios afortunados fueron testigos de un fenómeno muy inusual en Uruguay: la aparición de auroras australes en el cielo. Esto respondió a una potente tormenta solar que afectó a la Tierra, provocando auroras tanto en América del Sur como en países de Europa en los que generalmente no registran estos eventos.

Este sábado 31 de mayo la Oficina Nacional de istración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos —más conocida por sus siglas en inglés, NOAA—, emitió una "alerta de tormenta solar severa", que está previsto que golpeé a la Tiera entre el 1 y 2 de junio.

El fenómeno, más allá de generar un llamativo espectáculo en el cielo, puede afectar a los sistemas de GPS, las comunicaciones satelitales —por ejemplo a los dispositivos de Starlink—, y el suministro de energía. También podrían verse afectadas las radios de onda corta.

Ramón Caraballo, investigador del Observatorio Geofísico del Uruguay (Udelar) y Doctor en Ciencias de la Tierra por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), explicó a El País que, si bien "siempre hay lugar para lo inesperado", lo más probable es que en Uruguay no se observen a simple vista auroras boreales como las de 2024.

"Se prevé que la tormenta sea una G4 y va a ser un poco menor que la del año pasado de acuerdo a todos los modelos", señaló Caraballo.

Foto: Space Weather Live.

Las auroras, si el clima acompaña y los cielos están despejados, podrían captarse durante la noche de este lunes con la ayuda de una cámara profesional. "No creo que a simple vista se vean auroras, pero sí los sensores CCD de las cámaras pueden captar algún brillo rojizo", señaló.

"Precisás exposición. Capaz que con una foto normal no capturás nada, pero si ajustás el obturador para que se mantenga abierto unos segundos, captará más luz y se podrán ver (las auroras)", agregó.

Foto: Space Weather Live.

La mancha negra que observa en la foto es conocida como "hoyo coronal". Según explica Caraballo, a través del mismo se escapa el plasma solar, que es el que luego provoca las tormentas solares al llegar a la Tierra.

"Es una zona donde el campo magnético del Sol está abierto al espacio. Por ahí sale un chorro de radiación casi sin resistencia: son zonas donde las líneas de campo magnético se abren al espacio interplanetario", planteó.

Las zonas iluminadas que se observan en la fotografía representan al campo magnético, que se enrolla sobre sí mismo en bucles, manteniendo así el material "confinado".