Crónica del día que La Vela y No Te Va Gustar fueron locales en Cosquín Rock argentino: política, pogo y unión

17/02/2025, 15:58

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enano y emiliano.jpg — Sebastián Teysera y Emiliano Brancciari.

Una lenta procesión avanza desde todos los rincones del Aeródromo Santa María de Punilla con un único destino: el escenario Montaña. Con el Valle de Punilla como telón de fondo, La Vela Puerca irrumpe en escena. “¿Ta’ todo pronto?”, lanza Sebastián Teysera, con el sol pegándole de frente. Entonces, la sección de vientos dispara el riff de “El viejo” y la multitud, que hasta hace un instante se movía en orden, estalla. El barro que dejó la lluvia reciente pasa a un segundo plano; grupos de amigos serpentean entre la gente y empujan para acercarse. Para aumentar la urgencia, el Enano cede el primer estribillo al público.

Es el sábado 15, son las 18.40 y, aunque el primer día del Cosquín Rock despegó hace horas, el show de los uruguayos se siente como la verdadera inauguración de la jornada. La Vela, que hace rato juega de locataria en Córdoba —Teysera dirá que actuaron en 23 de las 25 ediciones—, tiene un repertorio capaz de atraer a un público heterogéneo que no solo se adivina por el amplio rango de edades, sino por la vestimenta.

Entre la multitud que corea con los brazos en alto estribillos como los de “Va a escampar” y “El profeta” se ven remeras de Los Piojos, Divididos, Wos, Babasónicos y La Mona Jiménez. Junto a un grupo de chicas que pasó horas preparando su outfit y se filma bailando con un trago en la mano, dos amigos —uno con la camiseta de Boca, el otro con la de los Stones— se abrazan y compiten para ver quién llega más alto. Ese mestizaje musical y estilístico que genera un festival como el Cosquín Rock es, para quien se tome el tiempo de verlo, tan potente como un hit cantado por miles de personas.

escenario montaña.jpg — El escenario Montaña del Cosquín Rock.

Las nubes bañan el Valle de Punilla, en las primeras filas flamean banderas con los nombres de distintas ciudades argentinas y alguien se abre paso en el pogo con una figura tamaño real de Hasbullah que se roba las miradas. La Vela es la banda sonora de una fiesta que no da respiro: tocan 17 canciones en una hora. La clave de su magnetismo está en los potentes arreglos de viento, la complicidad entre Sebastián “Cebolla” Cebreiro y Teysera, y la energía arrolladora que entrega la banda.

“Si no estás bien, mi voz te puede rescatar”, canta Teysera en “Por dentro” y la frase adquiere una nueva dimensión al sonar frente a la multitud, esa que, sobre el final, estalla en un grito cuando la banda irrumpe con “Vuelan palos”, cuyo riff inspiró el himno popular del grupo (el “Vamo’ La Vela de mi corazón”).

Si de postales se trata, la participación de Emiliano Brancciari de No Te Va Gustar en “Zafar” se lleva el premio. “Tenemos el placer y el orgullo de invitar al escenario a un hermano de la vida”, anuncia Teysera para presentarlo. “Es un hermano, un compatriota y hemos hecho un camino muy importante para todo lo que es el rock uruguayo”. Y así como le cede el estribillo de “El viejo” al público, hace lo mismo con el himno de la banda. El punto más alto llega con la sonrisa que Brancciari, Teysera y Cebreiro comparten mientras cantan el cierre, envueltos por el fraseo del saxo. “Los quiero, muchachos”, dice al despedirse.

Un rato después, la escena se repite. Los tres vuelven a abrazarse mientras los demás integrantes de No Te Va Gustar, que a las 20.40 también subirán al escenario Montaña, llegan para saludar a sus colegas de La Vela. Por un momento, parece que estamos en Montevideo. “Compartir con los primos está buenísimo”, le comenta Brancciari a El País luego de repasar, en clima de fogón, una de las canciones de su repertorio. “‘Zafar’ es un temazo, y tener el honor de cantarlo con toda la gente prendida fuego es alucinante”.

Entonces, se detiene a analizar la fuerza de esa respuesta del público. “Se te eriza la piel, porque son canciones que capaz nacen en una habitación con una guitarra, un cuadernito y una lapicera; uno se saca cosas de adentro y terminan siendo parte de la gente, que te lo devuelve con esa energía que es impagable, loco”.

emiliano brancciari.jpg — Emiliano Brancciari en el festival Cosquín Rock.

Por eso, ¿cómo no emocionarse al ver cómo una pareja se abraza, se mira a los ojos y se susurran el estribillo de “A las nueve” como si el resto de las 70 mil personas que agotaron la primera fecha del Cosquín de Córdoba no existiera? Esas postales hacen que todo cobre sentido.

El show de No Te Va Gustar también entrega 17 canciones que replica la euforia del de La Vela. La única diferencia está en el ambiente. Ya cayó la noche, las luces del escenario danzan como ovnis entre las nubes y una leve garúa cae sobre el Aeródromo. Se agradece. No solo refresca sino que le aporta épica a canciones como “Tan lejos” y “Venganza”.

Al igual que unas horas antes, Brancciari devuelve la gentileza e invita aTeysera a cantar “Pensar”. El momento está entre los puntos altos del show, y es posible que se repita cuando el festival vuelva a Montevideo. El Cosquín será en la Rural del Prado el 23 y 24 de mayo, y ambos grupos encabezan la grilla del segundo día. Un posible cruce pero con la emoción de estar en casa suena más prometedor.

Al inicio del espectáculo, el cantante de No Te Va Gustar anuncia que va a “hablar lo menos posible” para tocar más canciones.Sin embargo, cuando decide entregar unas palabras, lo hace con contundencia. “Queremos dedicar este show a todos nuestros colegas, en especial a María Becerra, Lali Espósito y Milo J, y repudiar el agravio y la censura en la cultura”, comentó en alusión a los artistas que han sido atacados por el presidente Javier Milei y antes de darle paso a “Los villanos”, una de las letras políticas más directas de sus últimos discos. Luego, como para completar el mensaje, se sumerge en el trance de “El camino”, que en este contexto adquiere un nuevo significado: “Se trata con desprecio, todo da igual, / Se gana a cualquier precio, nada esta mal (...) Volvé a nacer, no dejes que nos mientan, / Quiero creer, que no estamos a la venta”.

Para terminar de sacudir al público argentino, que hace años abraza a esta banda como si fuera local, NTVG se lanza a una versión de “Te voy a llevar” que engancha con un fragmento de “Todo un palo”, de Los Redondos. No es el único homenaje al grupo del Indio Solari: el arranque del show fue con una explosiva versión de “Un ángel para tu soledad”. El cierre, como siempre, es con “No era cierto”, y el canto colectivo llega a la cúspide. No Te Va Gustar se anota otra conquista en suelo cordobés.

Tras semejante escena, un pasaje de la entrevista con Brancciari en camarines cobra sentido. “La Vela primero, nosotros después, fuimos abriendo puertas”, comentó. “Y que hoy nos traten como una banda local, después haber hecho todo este camino de a poquito, de hormiga, es alucinante. Pagamos todos los derechos de piso habidos y por haber... Pero le ganamos con música”.

El Cosquín Rock Uruguay vuelve en mayo

El viernes 23 y el sábado 24 de mayo se celebrará una nueva edición de Cosquín Rock Uruguay, que tendrá a 36 artistas repartidos en dos días. Además de No TE Va Gustar y La Vela Puerca, la lista incluye a varias propuestas que actuaron en la edición argentina del festival, como los argentinos NAFTA, Bhavi, El Zar y Las Pastillas del Abuelo.

La producción ya anunció la grilla por cada jornada, y las entradas están a la venta en RedTickets. El abono por ambas jornadas cuesta 4170 pesos para el ingreso general y 7620 para el VIP. Las entradas por día cuestan 2170 pesos para el ingreso general y 4620 pesos para el VIP; hay 2x1 para socios de Club El País. El paquete VIP incluye parking exclusivo, vista preferencial, comida, bebida y preferencial.

Viernes 23 de mayo (Día 1):