Ashley Spencer, The New York Times
En Mi lista de deseos, la película de Netflix más vista en Uruguay, Sofia Carson interpreta a una maestra desmotivada que debe completar la lista de deseos de su infancia antes de hacerse con la herencia que le dejó su madre.

A diferencia de muchas estrellas millennial, Carson, que tiene 31 años, no comparte mucho de su vida privada en entrevistas ni se muestra demasiado abierta con sus casi 20 millones de seguidores en Instagram. Sus looks en la alfombra roja son un desfile de vestidos opulentos y guantes hasta el codo. Cita a Audrey Hepburn como su “máxima fuente de inspiración”. Incluso su nombre real, Sofía Lauren es en parte un homenaje a la realeza del Hollywood clásico.

Es una imagen elegante para una actriz que, hasta hace poco, era principalmente conocida por su papel de Evie, la hija adolescente de cabello azul de la Reina Malvada en las películas para televisión de Descendants de Disney. Esa popularísima franquicia musical generó viandas, muñecas, almohadones y mil productos con la cara de Carson.

Pero Carson, cuyos padres emigraron de Colombia y la criaron en Miami, ya era adulta cuando se convirtió en un nombre familiar entre los preadolescentes. “Enfrentar la magnitud de todo lo que se me venía encima, aunque por supuesto era abrumador, fue mucho más fácil de manejar que si hubiera sido una niña”, dijo.

Para cuando se estrenó la tercera película de Descendants en 2019, Carson, que tenía 26 años, decidió ser “muy intencional” al elegir papeles que le ayudaran a hacer la transición de los guiones de Disney a material juvenil y, eventualmente, a roles más adultos.

Encontró un aliado en Netflix. En los últimos cinco años, Carson está en seis películas de la plataforma desde la comedia dramática de baile Sigue el ritmo en 2020.

Notablemente, protagonizó Corazones malheridos en 2022, interpretando a Cassie Salazar, una música que se casa con un soldado para obtener seguro médico. En este proyecto, Carson también fue productora ejecutiva y compositora. Más recientemente, interpretó a Nora Parisi, la novia en peligro de un agente (Taron Egerton) en el thriller navideño Carry-On (2024), que actualmente es la segunda película más popular de Netflix de todos los tiempos, según datos de la plataforma. Este año protagonizará el romance My Oxford Year.

“Llevo 10 años de carrera”, dijo Carson, “pero, de corazón, todavía siento que esto es solo el comienzo.”

-¿Tenías tu propia “lista de deseos” cuando eras niña?

-Sí. Algunos ya los he cumplido: uno era cantar con Andrea Bocelli, y tuve el honor de presentarme junto al maestro muchas veces y lanzar dos canciones con él. Ser embajadora de Unicef también estaba en mi lista, y mi trabajo con ellos es ahora la parte más importante de todo lo que hago. Broadway también estaba ahí, y es algo que todavía me gustaría hacer.

-¿Cómo fue ser universitaria y estrella de Disney Channel al mismo tiempo?

-Siempre he sido una nerd orgullosa, y estudié comunicación con una especialización en relaciones internacionales. Pero tuve una experiencia universitaria muy diferente a la mayoría, incluso desde el principio, porque iba a audiciones entre clases, y luego escribía canciones en mi teclado con los auriculares puestos para no despertar a mi compañera de cuarto por la noche. Cuando hice la audición para Descendants, creo que estaba en mi segundo año de universidad. Zendaya, Bella Thorne y yo éramos finalistas para el papel de Evie. Pensé: “Nunca en un millón de años me lo van a dar”. Justo había terminado mis exámenes finales cuando recibí la llamada de mi agente diciendo que me habían elegido.

-En 2022 lanzaste un álbum como solista. Mientras tanto, tus excompañeras Sabrina Carpenter y Dove Cameron han dejado la actuación para enfocarse en sus carreras como estrellas del pop. ¿Es un camino que podrías seguir tú también?

-No. Eso no es lo que me define. Encuentro mucha alegría y satisfacción al contar historias a través del cine. Y también disfruto hacer música a mi manera. Muchos hombres nunca entendieron del todo mis elecciones musicales, el hecho de tomar un camino que no era el de la estrella pop, ni el de la imagen sexy. Me ofrecieron canciones que, para mí, eran degradantes para las mujeres, que eran despectivas o demasiado sexuales. Canciones que no me sentía cómoda cantando. Uno de los ejecutivos más poderosos de la industria me dijo que, si no usaba menos ropa, cantaba más sobre sexo o decía más groserías, nunca lograría el éxito. No tomar el camino de la estrella pop me ha parecido lo más natural.

-Corazones malheridos recibió críticas (por supuesta inclinación antiárabe y promilitar). Defendiste la película. ¿Cómo ves esa controversia?

-Salió en un momento -y aún estamos en un momento- en el que el mundo está muy dividido. Nuestro objetivo era mostrar lo hermoso que es liderar con amor y ver nuestras diferencias como fortalezas. Sigo defendiendo lo que hicimos, y en cierto modo sentí que algunas personas no entendieron del todo el mensaje. Pero siempre es importante escuchar y aprender.

-¿Cómo ves tu carrera en el futuro?

-Quisiera emular las carreras de Barbra Streisand y Cher, que redefinieron lo que significa ser una mujer en esta industria: ser directora, productora, ejecutiva, música, compositora. Me encantaría trabajar con Greta Gerwig, Baz Luhrmann, Christopher Nolan, Sofia Coppola. Quiero hacer teatro y seguir haciendo películas y música que me hagan feliz.