Redacción El País.
La modelo y comunicadora Florencia Alba González espera a su segundo hijo a los 40 años. La uruguaya exparticipante de Gran hermano 2012 ya es madre de Alba, de 8 años. Aunque según reconoce las circunstancias del embarazo no fueron las ideales, con crisis de pareja incluida, la madre inminente celebra la llegada del bebé, a quien llamarán Lorenzo.

-¿Cómo estás transitando este tramo final del embarazo?

-Recién ahora estoy disfrutando un poco más de este embarazo. Armando el equipo con el que voy a estar toda mi vida. Ansiosa por momentos, ya que me queda un mes para la llegada de Lolo y pensando cómo voy a tener que armarme nuevamente con un bebé. Por suerte Albita me está ayudando muchísimo, no solo en lo emocional sino que es como una mini mamá. Ella quiere estar en todo y colabora en esta etapa que es la recta final.

-Es tu segundo hijo, ¿en qué fue diferente o fue parecido este embarazo?

-Cuanta razón cuando dicen que “No todos los embarazos son iguales”. El de Albita lo viví con una paz y tranquilidad inigualables. Era mi primer bebé y estaba también más ansiosa con todo. No tuve complicaciones. Él de Lolo ya arrancó complicado, casi 9 años después el cuerpo no es el mismo. La situación en la que estaba no era la misma y lamentablemente era un embarazo de riesgo. No pude disfrutar nada al comienzo, recién a los 7 meses sentí que podía estar tranquila y pensar en lo que se viene.

-A nivel familiar las circunstancias se dieron de forma particular, con algunos problemas de pareja, ¿qué se puede saber del tema?

-Lorenzo es un bebé deseado y que va a estar rodeado de amor por todos lados. Tiene a sus abuelos, tías, tíos, primos, primas y muchos amigos que lo están esperando con ansias. Además de nosotros sus papás y su hermanita que es la que más amor le va a dar. Si hay algo que aprendí es que el que quiere estar en la vida de un niño, está sin que se lo pidan.

Fotos: Julia Márquez – By Aca Fotografía

-¿Qué sentimentos te afloran a poco de recibir a tu segundo hijo?

-Hay dos sentimientos que tenemos las mamás de por vida con nuestros hijos. El miedo y la felicidad. Es un matrimonio que no se va a separar jamás. Desde que nacen hasta que son mayores nuestros hijos sabemos que no hay etapa en su vida que una sienta ese miedo a que les pase algo o también a estar haciendo las cosas mal una misma. Con la felicidad me pasa lo mismo, verlos reír, aprender, jugar y saber que son niños amados me llena el alma. Lo que tengo clarísimo que no existe una madre perfecta, que es imposible serlo. Que tenemos que encontrarnos nosotras como mujeres, tener vínculos que nos impulsen y nos apoyen. Sin cuestionarnos en nuestras crianzas y que todas podamos encontrar una manera para ser buenas madres.

-¿Cómo fue la selección del nombre “Lorenzo”?

-Es un nombre que nos gustó mucho desde el comienzo. Todos estábamos de acuerdo. Sobre todo su hermana que ya lo bautizó como “Lolito”.

-¿Cómo ha tomado la hermana la llegada de un nuevo integrante familiar?

-En ella vi una emoción que nunca había visto. Los niños son tan expresivos y la manera en que demuestran el amor es impagable. Siempre decía que su sueño era tener un hermano. Justo en esa navidad en su cartita le pedía a Papá Noel que no se olvide del bebé. Fue hermoso ver su reacción cuando se enteró. Esos momentos no me los voy a olvidar jamás. La vida con un hermano es un viaje de momentos inolvidables desde la infancia hasta cuando son adultos. Estoy muy feliz porque siento que para Albita la llegada de Lolo es magia. Y sé que van a estar unidos acompañándose toda la vida.

-Compartes el día a día de tu embarazo en redes. ¿Qué tipo de mensajes te gusta transmitir a tus seguidores en este momento?

-Yo siempre muestro lo lindo, cómo viene creciendo, el amor que recibo de mi entorno. Pero no siempre los embarazos son fáciles y no todo lo que brilla es oro. En este segundo bebé me di cuenta que no siempre es como uno quiere. Que hay que entender que cuando las cosas son para uno son para uno. Y cuando no lo son, hay que aferrarse a algo.

-¿Qué devoluciones de la gente te generan más satisfacción?

-Un bebé es una bendición. Yo tengo un círculo de gente que en este embarazo me demostró tanto pero tanto cariño y apoyo. Las devoluciones siempre fueron buenas y justas. Gracias a ellos en los momentos más duros pude salir y ver más claramente las situaciones. La importancia de tener personas que nos ayuden y cada una a su manera, es fundamental a lo largo de la vida. Y hay una frase que me quedó grabada. Una vez que la estaba pasando mal y una persona me envió en el momento justo: “Cuando alguien se está ahogando no es el momento de enseñarle a nadar. Hay que extenderle la mano”.

Fotos: ulia Márquez – By Aca Fotografía

-¿Cómo seguirá tu año a nivel laboral?

-Debido a cómo arrancó el embarazo tuve que estar en casa. Pero pienso volver ni bien pueda hacerlo. Es muy importante poder volver a trabajar. No solo por lo económico sino también por la salud mental de cada una. La mujer necesita reincorporarse y no dejarse estar. La logística nos cambia completamente, pero no es imposible. Hay que tener un buen equipo y las cosas salen. También me gustaría poder trabajar en televisión o relacionado al ambiente.

-¿Has mirado las últimas ediciones de Gran Hermano? ¿En qué cambió el formato respecto a tu participación?

-Me pasó de mirar la edición que estaba Furia y lo miré hasta el final. El formato cambia porqué tiene que cambiar. Los tiempos, las formas y la gente no es la misma que en el 2012. No es el formato que no me guste... es como entra ya todos los participantes. Van derecho a jugar, a decir sus estrategias, a plasmar el juego inmediatamente. Y sigo manteniendo que no hay guiones, pero sí la producción elige quién se queda y quién se va. Me da gracia ver a gente en la TV uruguaya diciendo que sabe cómo son las cosas. No tienen idea.

-Albita ha protagonizado varios comerciales. ¿Qué te genera que tenga esa inclinación y facilidad por el modelaje y la comunicación?

-Como Mamá me genera una satisfacción inmensa al verla en la pantalla o en alguna gráfica en el shopping. Pero sobre todas las cosas valoro las experiencias que vive cada vez que tiene una publicidad. Es una aventura para ella. Conocer lugares y amigos nuevos. Yo la acompaño siempre y lo veo. La pregunta que siempre le hago es “¿te estás divirtiendo?”. Es fundamental para mì que se divierta. Recién tiene 8 años y nunca estudiò actuaciòn. Le sale natural. Ojalá que le salgan más cosas y siga. Tiene talento.