La tardecita empezó con el corte de luz en parte de Montevideo, incluyendo el Gran Parque Central, lo que generó que los hinchas entraran y subieran las escaleras del escenario a obscuras. La noche terminó con una derrota de Nacional 2-0 contra Inter, lo que provocó la eliminación de la Copa Libertadores y dejar muy comprometida la clasificación a la Sudamericana, porque tiene que ganarle a Atlético Nacional, esperar que Bahía pierda contra Inter en Porto Alegre y ver las diferencias de los resultados.
La jornada finalizó tan negra como había empezado la tarde, con un corte eléctrico que provocó que los ascensores ni los televisores funcionaran, así como tampoco toda la iluminación de los pasillos del Parque.
Al minuto Morales mandó la pelota al medio y Nacional estuvo cerca de marcar el primero. Apenas 60 segundos después el Diente López sí la mandó a guardar, pero estaba en offside. El tricolor parecía haber salido con la energía necesaria para meter a Inter abajo de los tres palos. Aunque ese envión inicial se fue diluyendo al punto de que Coates y Mejía, en jugadas diferentes, salvaron la caída de su arco.
Pablo Peirano explicó que puso a Pereyra para sumar un volante más de creación y así tener otro buen lanzador para buscar a la estrella del equipo: Villalba. El plan no funcionó, porque los movimientos del 10 fueron lentos, en algunos casos imprecisos, y porque el Galgo se lesionó temprano en el partido y, pese a que tuvo alguna corrida de las suyas habituales, se lo vio notoriamente sentido en el posterior, y estuvo incómodo; en el segundo tiempo pasó prácticamente desapercibido.

Tampoco le funcionó al DT el ingreso de Romero en lugar de Recoba, ya que en ningún momento Nacional sacó rédito de la banda izquierda, donde Báez tuvo un partido para el olvido, dando pases a las rivales y perdiendo pelotas insólitas.
La lesión de Coates -estaba siendo impasable- le pasó factura al Bolso, pues la defensa se desestabilizó sin él en cancha y para peor Calione no entró bien y no realizó un gesto técnico adecuado para evitar el gol de Ricardo; esa jugada empieza con una pérdida en campo rival de Báez. Gol en la hora del primer tiempo, de lo peor que podía suceder.

Los fanáticos empujaron en la tribuna, los jugadores en la cancha, el Diente tuvo dos situaciones claras -una dio en el ángulo, la otra se la sacaron al córner cuando era gol-, pero el empate no llegó. Ni Petit ni Recoba entraron con soluciones, y las ganas de Herazo tampoco fueron suficientes. Cuando el tiempo apremiaba Otero pegó un tiro libre en el horizontal: la suerte parecía echada a esa altura.
El árbitro no pitó una clara falta sobre Oliva y el juego se fue con el gol de Aguirre. Nacional perdió los dos partidos de local, tiró por la borda el resultado en Salvador y la luz de la Libertadores se apagó.

-
La falta a Oliva en el segundo gol del Inter que puede complicar la clasificación de Nacional a Sudamericana
Solo queda aspirar a la Sudamericana: así quedó el grupo F de Nacional, eliminado de la Conmebol Libertadores
Cuándo vuelve a jugar Nacional por la Libertadores: el tricolor cierra la fase de grupos ante Atlético Nacional