Disparate en la Biblioteca

Compartir esta noticia

La decisión de anunciar el cierre indefinido de la Biblioteca Nacional, justo el día que se festeja el Día del Libro, parece una tomadura de pelo. Solo un jerarca dominado por la petulancia es capaz de anunciar algo así, y con semejante desparpajo. La Biblioteca tiene problemas desde hace tiempo, pero la gestión anterior había cumplido en mejorar el edificio, y reinsertarla en la sociedad. Si esta decisión la hubiera tomado un gobierno no frentista, habría un escándalo nacional.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar