El desembarco de la aplicación de comercio electrónico china Temu en Uruguay ha generado impactos en empresas uruguayas que ven caer sus ventas ante el boom de compras al exterior mediante el régimen de franquicia sin impuestos y otro régimen que permite la importación pagando un único tributo del 60% del valor de la adquisición. La preocupación por el "efecto Temu" está instalada en gremiales empresariales y también llegó al gobierno de Yamandú Orsi que comenzó a "recabar información" y "analizarla en detalle", dijo a El País el director de la Asesoría de Política Comercial del Ministerio de Economía y Finanzas, Juan Labraga.
El régimen de franquicia sin impuestos permite a cada uruguayo mayor de 18 años, realizar en el año tres compras en el exterior por Internet por un máximo de hasta US$ 200 y por hasta 20 kilos de peso cada una. Ese mecanismo pasó de registrar en el entorno de 45.000 paquetes al mes arribados a Uruguay a 170.349 en febrero pasado, un récord histórico.
El "efecto Temu" es claro en esto, ya que desde que la aplicación desembarcó a mediados de 2024 en Uruguay las encomiendas han ido en aumento: 51.934 en mayo, 60.731 en junio, 87.102 en julio, 97.452 en agosto, 101.163 en setiembre, 115.217 en octubre, 101.846 en noviembre (cuando empezó a haber dificultades para procesar la cantidad de envíos), 166.900 en diciembre (mes que habitualmente es el más alto por las fiestas), 100.190 en enero, 170.349 en febrero y 167.425 en marzo.
Además, el "efecto Temu" llevó a impulsar también las compras web al exterior bajo el régimen simplificado, que permite importar productos de hasta US$ 200 sin límite anual de cantidad de envíos, pagando un tributo único del 60% del valor de factura con un mínimo de US$ 10.
Según un informe de la Cámara de Comercio y Servicios (Ccsuy), "hasta abril de 2024, se registraban en promedio 6.500 envíos mensuales bajo este régimen. Sin embargo, en mayo (con la llegada de Temu) comenzó un crecimiento explosivo, duplicándose los envíos y alcanzando 160.000 compras sólo en diciembre. Esto representa un crecimiento interanual de casi 2.000%".

La asesora de la Ccsuy, Ana Laura Fernández explicó semanas atrás en la Comisión de Hacienda de Diputados, que “quizás en primer lugar las (empresas) más impactadas” por el "efecto Temu" fueron "las micro y las pequeñas empresas, pero hoy el impacto ya llega a todas, incluso a aquellas de mayor porte”.
De acuerdo a los empresarios, los rubros más afectados son vestimenta, juguetes, hogar, calzado y electrónicos.
La preocupación empresarial, "no es si los consumidores compran en el exterior o no. El problema es que hoy los comercios uruguayos compiten con reglas de juego completamente distintas. Y eso termina afectando a quienes apuestan por producir, invertir, generar empleo y formalizar su operación en Uruguay”, dijo ante la Comisión de Hacienda de Diputados, el
presidente de la Cámara de la Economía Digital (CEDU), Andrés Marrero.
"Esta situación genera una competencia fiscal y regulatoria claramente desigual, que perjudica a comercios nacionales que pagan impuestos, cumplen con normativas sanitarias y de etiquetado, y generan empleo formal”, agregó en esa ocasión.
¿Qué dice el Ministerio de Economía y Finanzas respecto al "efecto Temu"?
En entrevista con El País, Labraga señaló que en una reciente reunión que tuvieron él y el ministro de Economía y Finanzas, Gabriel Oddone con funcionarios de la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR, por sus siglas en inglés) "hablamos del comercio electrónico" y consultaron sobre el "sistema de mínimis" que tiene EE.UU. para importaciones de consumidores finales por hasta US$ 800, ya que "le pusieron impuestos a China y lo están estudiando para el resto del mundo".
"Entonces le preguntamos si iban a bajar los US$ 800 o qué iban a hacer y nos dijeron que lo estaban estudiando precisamente. A su vez ese sistema en Europa también desapareció", contó Labraga.

Labraga señaló que "en Uruguay está muy en boga en el tema, entonces lo que nosotros estamos haciendo es, por el efecto Temu, recabar información y analizarla en detalle, teniendo dos precauciones: sabiendo que es un sistema muy querido por los consumidores y muy útil para bajar márgenes, pero también siendo conscientes que eventualmente en ciertos nichos de mercado específicos está causando un problema".
Ese problema "no (es) en el comercio en general. Cuando uno ve los números del comercio en general en Uruguay están bien, ahora hay ciertos sectores que puede ser que esté causando (impacto). Entonces queríamos saber las mejores prácticas internacionales al respecto", agregó.
Consultado respecto a si ese análisis que realiza el gobierno, es con la idea de tomar medidas, Labraga respondió: "es con la idea de analizar el tema, porque hubo una modificación sustancial, el régimen de franquicia lo usaban más o menos 220.000 uruguayos por año y el año pasado lo usaron 650.000. Es un cambio importante que amerita analizarlo. Siempre los compromisos internacionales Uruguay los va a cumplir. Tenemos un compromiso del TIFA, eso hay que cumplirlo. Ahora, hay que ver que la competencia sea leal".
El compromiso establecido en el TIFA entre Uruguay y Estados Unidos es de facilitar el comercio electrónico permitiendo compras por hasta US$ 200 sin impuestos de ningún tipo, ni aduaneros ni internos, establecido por ley.
"Uruguay en su momento tomó la determinación de ese compromiso (en el TIFA) dárselo a todo el mundo. El acuerdo que tiene Uruguay es el compromiso con Estados Unidos", explicó Labraga.
Respecto al régimen simplificado, que permite comprar por hasta US$ 200 por Internet en el exterior sin límite de cantidad de envíos, pagando un único tributo de 60% del valor de la importación, Labraga dijo que "prácticamente no se usaba hasta el año 2023" inclusive.
"Era un régimen muy marginal y el año pasado lo usaron 330.000 personas, se disparó su uso y recaudó cerca de US$ 12 millones cuando recaudaba US$ 500.000" al año, señaló.
"Ahí hay que distinguir, porque esa parte del régimen no es competencia desleal, está pagando los impuestos. Hay que discutir, si querés podemos empezar a discutir si 60% está bien o está mal, pero ese paga los impuestos", afirmó Labraga.