Redacción El País
Casi nadie conocía su historia. Enrique, de 48 años, murió el sábado en la Estación Goes mientras dormía a la intemperie, y si bien muchos vecinos y trabajadores de la zona lo conocían aunque sea de vista, pocos sabían cómo había llegado hasta allí. El ministro de Desarrollo Social, Gonzalo Civila, brindó una conferencia de prensa para informar este sábado sobre el caso, que sigue siendo monitoreado por la cartera para conocer detalles.

Hace meses que Enrique había elegido la Estación de Goes para pernoctar. Pero no estaba solo, ya que allí suele instalarse un grupo de personas en situación similar a la suya, que ya son conocidos por quienes frecuentan el lugar, ya sea para transitar o para llevar a sus niños a los juegos.

Si bien se manejaba en silla de ruedas porque le habían amputado una pierna, quienes lo conocían lo definen como una persona “muy independiente” y que “solía manejarse solo para todos lados”.

Un día después de su fallecimiento, al lado de una mesa de ping pong, todavía permanecían sus pocas pertenencias, entre ellas un pequeño colchón en el que dormía.

Durante el día se dedicaba a vender curitas y se desempeñaba como cuidacoches en las cuadras cercanas. Si bien no solía mantener conflictos con los vecinos -aunque llegó a protagonizar situaciones tensas, según dijeron algunos a El País-, la mayoría de los problemas se daban cuando se disputaba la cuadra con otros cuidacoches informales que frecuentaban la zona. “No quería irse para no perder el lugar en la cuadra”, dijo a El País un vecino.

“Sé que había gente que colaboraba, pero otros no porque veían que después estaba consumiendo”, contó un trabajador municipal.

Jorge, guardia del centro cultural ubicado en la estación, dijo a El País que suelen concentrarse “ocho o nueve” personas en situación de calle, entre las que se encontraba Enrique. Los jueves suele organizarse una olla popular, y aunque el alimento se brinda sobre las 19:00, Jorge asegura que desde varias horas antes se puede ver una larga fila.

“La gente del barrio suele ser muy solidaria y lo ayudaba. A él y también al resto, que ya se habían armado su piecita en la estación”, aseguró.

La actual diputada por el Partido Nacional y exdirectora de Protección Social, Fernanda Auersperg, apuntó a través de su cuenta de X contra Micaela Melgar, directora del Instituto Nacional de Alimentación, por una publicación realizada en 2020, cuando recién comenzaba el gobierno de Luis Lacalle Pou.

“La muerte de una persona en calle es responsabilidad del Estado siempre y nunca de los trabajadores. Las autoridades no tienen un plan invierno, no tienen centros de emergencia climática; los trabajadores no tienen herramientas. La responsabilidad es del estado, de nuevo”, había escrito Melgar.

Cinco años después, Auersperg recordó que en ese momento se estaba viviendo la pandemia de Covid 19, mencionó las dos muertes de personas en situación de calle en los últimos días (ver recuadro) y escribió: “El gobierno no debe amputarse ninguna herramienta por temas ideológicos, la ´internación compulsiva´ tan resistida por la izquierda ayudó a salvar muchas vidas en los años pasados”.

Luego de conocerse la noticia, Civila aseguró que este hecho no involucra “un número sino una persona”, y agregó que Enrique había ingresado en varias ocasiones a refugios del Mides, mientras que en otras “pidió cupo” y no lo utilizó.

El 19 de mayo entró a un refugio y luego fue internado en un hospital de ASSE, aunque luego no tuvieron más noticias sobre él hasta el sábado. Civila expresó que se están planificando nuevas medidas más allá de la extensión de los cupos en refugios, como la creación de centros barriales comunitarios.