Cristian Calvo y Leandro Fagúndez se conocieron en Uruguay hace muchos años trabajando en El País. En 2017, Calvo decidió emprender en España tras emigrar con su pareja a Mallorca, mientras que Fagúndez se quedó y creó Ogreat, una agencia de marketing y comunicación digital que poco a poco comenzó a ganar clientes en el mercado local, principalmente empresas, políticos, fundaciones y ONG.
El emprendimiento concentró su negocio en Uruguay donde cosechó más de 30 clientes hasta que, en 2024, Calvo le propuso a Fagúndez retomar una antigua idea que tenían juntos: desembarcar con Ogreat en España.

«Siempre quedamos en o y estaba la idea de la expansión internacional de la agencia, sobre todo a nuevos mercados en Europa, identificando en España un entorno clave por su dinamismo empresarial. Pasó la pandemia y yo quería retomar el tema comercial porque en Uruguay tuve experiencia en la parte de ventas como jefe comercial del diario El País. Le propuse a Leandro el proyecto, aceptó y en diciembre decidió venirse. En marzo lanzamos la plataforma acá y juntos impulsaremos aún más el negocio» en ese país, resumió Calvo.

En tanto, Fagúndez dio el paso convencido de que la agencia estaba lista para avanzar al siguiente nivel y apostar a consolidar su marca en el mercado del Viejo Continente. «Sabíamos que podíamos competir afuera, pero también que había que estar. No se puede liderar desde lejos», explicó el emprendedor.

Al igual que en Uruguay, la empresa desembarcó en España con su abanico completo de servicios. La firma realiza redacción de contenidos para diversos soportes y plataformas, gestión de medios tradicionales y digitales, organización de eventos, content creation, acciones de branding, desarrollo web, redes sociales y community manager. Además, Fagúndez se ha posicionado como conferencista dictando charlas sobre marketing y empresas en distintos eventos internacionales.

Con Ogreat, «no prometemos likes. Prometemos resultados. Cada acción que hacemos tiene una lógica comercial, una estrategia detrás, y un seguimiento real. Porque sabemos lo que cuesta cada peso invertido», recalcó Fagúndez.

Su socio reconoce que son «nuevos» en el mercado español, pero confía en el valor de la experiencia cosechada a lo largo de los años. «Ya viene rodando hace mucho tiempo y tenemos una estructura y soporte que nos permite estar a la altura de los clientes», destacó Calvo.

Así, ya concretaron acuerdos con empresas. «Cerré con tres hoteles en Mallorca y tenemos otros clientes como restaurantes. Ahora estamos negociando en Alicante con un empresario que cuenta con una franquicia de restaurantes», indicó.

La avanzada comercial por ahora está en manos de Calvo desde Mallorca pero el plan de los emprendedores es radicarse en alguna zona cercana a Valencia o Alicante y desde allí escalar el negocio al resto del país.

Actualmente, Calvo vive en Mallorca con su pareja, que trabaja en el sector de seguros, y un hijo que nació el año pasado. Su apuesta por este nuevo proyecto también responde a su búsqueda personal de poder tener «más de tiempo con mi hijo y acompañar en su crianza a mi señora», explicó.

Calvo asegura que ha logrado afianzarse en España y hoy reparte su tiempo entre la familia, los amigos, viajar por Europa y compartir con una «gran comunidad de uruguayos».