¿La música puede ser una herramienta médica para aliviar enfermedades neurodegenerativas como alzheimer? Daniel Gadea está seguro que sí. Por eso fundó junto a Damián, su hijo, Ethhar e ideó la aplicación homónima, cuya hipótesis es relativamente sencilla: la música tiene la capacidad de mejorar la calidad de vida de aquellos pacientes con enfermedades como alzhéimer.
“Este es el resultado de varios hechos que confluyeron en una misma idea”, explica Damián sobre la génesis de la aplicación pensada para pacientes con enfermedades neurodegenerativas. “Por un lado, ayudar a quienes padecen, por ejemplo, algún tipo de demencia. Por otra parte, nosotros contamos con la experiencia de haber lidiado directamente con alzhéimer en la familia”, agrega. Y además el proyecto de padre e hijo, incorpora la trayectoria profesional de Daniel, que fue discjockey durante un cuarto de siglo.

“Mi abuelo tuvo alzhéimer, y mi padre intentó recurrir a la música para aliviarlo, algo que los médicos en ese momento le dijeron que no hiciera”, rememora Damián y agrega que su padre se quedó con una espina.
“Al tiempo, se anotó en varios cursos y talleres de la Facultad de Ciencias, para entender mejor la relación entre la música y el cerebro. Así empezó”, repasa.
El método es el siguiente: la aplicación elabora -a partir de las respuestas de un cuestionario- listas de reproducción musical personalizadas.
La idea es que las canciones que forman parte de las listas de reproducción -al estar diseñadas de manera personalizada- evoquen recuerdos y que esta evocación tenga efectos positivos sobre el o la paciente.
“Al principio, mi padre hacía todo prácticamente solo: llamaba, hablaba con los familiares de los pacientes, indagaba sobre su historia de vida (a dónde iba a veranear, qué radios escuchaba, por ejemplo) y en base a eso armaba las listas de canciones”, enfatiza Damián.
Según relata, los resultados, “eran increíbles”. “Gente que por ejemplo no podía dormir, comenzó a hacerlo”.

La visión de una neuróloga*
La música activa prácticamente todas las áreas del cerebro, fomentando la memoria, las emociones y la comunicación. La música estimula el sistema auditivo(lóbulo temporal donde se descompone el sonido en sus distintos componentes), motor(corteza motora y cerebelo, coordinación), límbico (genera emociones activando estructuras como amígdala e hipocampo que activan la corteza asociativa) y de recompensa (núcleo accumbens y estriado, liberando dopamina y bajando el cortisol), conectando ambos hemisferios cerebrales permitiendo la integración a través del cuerpo calloso de ritmo y lenguaje con melodía y emoción, promoviendo además la neuroplasticidad (base de la estimulación cognitiva). La música compleja o novedosa estimula la corteza prefrontal, implicada en la toma de decisiones, atención y anticipación.
Por ejemplo, canciones familiares pueden activar el hipocampo, evocando recuerdos, mientras que los ritmos y melodías estimulan la corteza motora y áreas emocionales como la amígdala. Además, la liberación de dopamina genera bienestar y reduce el estrés, ayudando tanto a pacientes como a cuidadores.
Hay muchos trabajos científicos que avalan en uso de la musicoterapia a través de la realización de ejercicios específicos llevados adelante por un especialista, demostrando que mejora significativamente la calidad de vida de los pacientes.
*Dra Maria Inés Nouzeilles
Directora Instituto Neurologico del Este
La pandemia bajó la intensidad de las actividades, pero paulatinamente los Gadea pudieron retomar un ritmo de trabajo más elevado y fue ahí empezaron a pensar en diseñar una aplicación que pudiera facilitar el proceso realizado hasta ese momento.
A lo largo de todo el camino, Ethhar tejió alianzas y consiguió apoyos que ampliaron el radio de acción del emprendimiento, que ahora abarca -además de Uruguay- países como Argentina y España.
También han sumado a más personas al emprendimiento, como al médico Roberto Ventura, especializado en disciplinas neurológicas.
Para Damián Gadea, el año que terminó hace poco fue uno en el cual “se plantaron muchas semillas”, y tiene la esperanza de que este sea el año en el cual estas den frutos.
“No estamos en el punto óptimo pero hacia ahí estamos yendo”. Ese punto óptimo al que refiere Gadea, es llegar a instaurar este método como una terapia alternativa válida en aquellos casos considerados pertinentes.
—Hace poco decías que algunos médicos desalentaron a tu padre cuando él mencionaba su idea, ¿eso ha cambiado ahora?
—En parte sí. Desde que empezamos buscamos respaldos científicos y académicos, y los hemos obtenido. El ida y vuelta con esos profesionales ha sido constante, lo cual nos ha enriquecido.
No se trata de una única playlist, sino que la aplicación diseña más de una, dependiendo de qué tipo de efecto quiere lograrse. Un conjunto de canciones para “activar” al pacientes, otro para crear una sensación de serenidad, y así.
Damián agrega que la aplicación tiene un costo de aproximadamente US$ 20 mensuales, y que toda la información puede hallarse en la web oficial de Ethhar (www.ethhar.com).
Una distinción para la aplicación
Pensar en Grande, el programa desarrollado por Bid Lab, Endeavor y Xeniors que promueve la creación de soluciones innovadoras para mejorar la calidad de vida de las personas mayores en Uruguay y la región, destacó a Ethhar. El programa impulsa la Economía Plateada, apoya a emprendedores que diseñan soluciones innovadoras para las personas mayores. Con capacitaciones, mentorías y actividades abiertas, acompañan a proyectos que buscan transformar la forma en que vivimos la longevidad.
Entre más de 350 proyectos, 10 fueron seleccionados como casos de éxito; uno de ellos fue Ethhar. Como se explica en la nota central, es una aplicación que realiza intervenciones musicales personalizadas enfocadas en personas mayores, principalmente en aquellas diagnosticadas con enfermedades neurodegenerativas, como el Alzheimer.